martes, 22 de septiembre de 2009

Una espada en el alma

Las personas vienen y van frecuentemente en nuestras vidas, algunas se convierten en personas importantes, algunas se convierten en amores imprescindibles, amistades entrañables, aunque no estén todo el tiempo cerca de nosotros se convierten en parte fundamental en nuestras historias, desafortunadamente algunas solo llegan para hacernos aprender, pero no aprender porque quieran enseñarnos, sino aprender de nuestro sufrimiento, de nuestro dolor, por una u otra cosa, con alevosía o sin ella, lastiman, se pueden volver imprescindibles, decir tantas palabras bellas que impresionan nuestros oídos, pero en el momento en que hay que demostrar la amistad, el cariño, es cuando nos damos cuenta que la misión que tenían en nuestras vidas era el enseñarnos a no confiar tanto en la gente, en juzgar antes de brindar nuestro cariño, nuestro amor, nuestra amistad

Desafortunadamente en esta época es difícil encontrar a alguien que no sea egoísta, a alguien que realmente brinde su amistad y su cariño sinceramente, a alguien que evite el lastimarnos, las personas tenemos problemas, muchos, todos en general, no hay nadie que se salve de ello, todos tenemos algún defecto: imaginamos cosas, somos posesivos, inseguros, celosos, juzgamos a las personas, en fin, una lista de defectos, que podría llenar un blog completo con ellos y sus detalles, pero la amistad, el cariño, el amor se demuestra aceptando a esa otra persona con todo y sus errores, sin pretender cambiarla, las personas no cambian, un alcohólico siempre será un alcohólico, puede estar recuperado, pero en el momento que vuelva a tomar, regresará a sus parrandas, un golpeador siempre lo será, una persona insegura siempre lo será

Hay una frase que dicen de las mujeres, que no hay que entendernos, que solo hay que querernos, en cierto punto tiene algo de razón, a veces ni nosotras mismas nos entendemos, pero siempre necesitaremos ese cariño y apoyo de la gente que más nos importa, ese es el problema, pocas saben vivir en la soledad, los humanos somos animales sociales, necesitamos estar en una sociedad más o menos cuerda para poder desarrollarnos, se nos ha enseñado que las personas van de dos en dos y que si no estamos en pareja estamos incompletos, el error más grande que hemos tenido ha sido el creer toda esa serie de palabras y frases basura: busco mi media naranja, tu me complementas, en fin, otra lista de la cual podría llenar un blog completo

El problema de que las personas vengan y vayan no es que salgan y entren de nuestra vida, sino lo que dejan atrás, lo que nos dejan, a veces no es tan problemático, un hermano se puede ir lejos, pero lo que deja es que siempre podré contar con él, esa es la parte buena, pero también alguien que dijo ser mi amigo se puede quedar en donde está y haber demostrado que en realidad nunca fue mi amigo, las dos pérdidas dan tristeza, una por la lejanía y la otra por la decepción

Estaba viendo un programa, decían que el enojo es un dato de la depresión, cuando estamos enojados damos a saber que algo no está bien con nosotros, el problema es que no lo sabemos, el problema es que no nos damos cuenta o no queremos darnos cuenta, el primer paso para resolver un problema está el reconocerlo, el segundo en pedir ayuda que puede ser profesional o no, el tercero está en corregirlo

Mi problema es que creo en las palabras que me dicen, que creo el cariño que dicen tenerme, que creo que hablar de vanalidades es una amistad, cualquier persona te puede dar un buen consejo, si entras a una sala de chat y pides a alguien que te lea, lo hace, te dará un buen consejo si es una persona cuerda, la atención y un buen consejo en materia sentimental, familiar, escolar, etc. eso no es una amistad, ese concepto abarca una enormidad de situaciones, de vivencias, el hablar por teléfono, el salir más de 5 veces en año y medio, el aceptar a las personas tal y cual son, con sus defectos y sus virtudes, eso es lo difícil, yo puedo aceptar ser amiga de alguien inestable, que necesita cariño, atención, que se cree invulnerable, pero ese alguien puede rechazarme por mi carácter de médico, por mi locura inestable, mi problema con las relaciones es la dependencia y un grave problema de atención, el enamorarme de las personas equivocadas que tarde o temprano darán la vuelta y saldrán de mi vida, mi problema es que confío en exceso en quienes no debería de hacerlo, abro mi corazón y lo único que hacen es sacarlo de mi pecho y tirarlo a la basura (si es que no lo pisan y me humillan)… la parte buena es que ya me di cuenta del problema y voy en el segundo paso, la parte mala es que no se sale, no se cura, no se soluciona tan fácilmente como quisiera

Las personas vienen y van en nuestras vidas, unas pueden apoyarnos y querernos, unas pueden estar cerca o lejos, unas pueden levantarnos y otras lastimarnos, el punto es que nosotros les damos a las palabras y a las acciones la fuerza suficiente como para lastimarnos, para herirnos, para deprimirnos, para ponernos muy mal, lo importante es no darles esa fuerza, decidir que no nos van a lastimar, el problema es que cuando son importantes para nosotros, es difícil de afrontar, es difícil que no nos derroten, no nos tumben, quedarnos en pie es lo más difícil de hacer cuando alguien que considerábamos importante para nosotros se va, nos da la espalda pisoteando nuestro ego, nuestra dignidad y nuestra estabilidad emocional

Hubo una vez, más bien dicho, dos veces que las que creía mis mejores amigas me dieron la espalda, a una no la quiero ver, a la otra la reencontré, el tiempo pasó y la situación cambió, pero la tercera vez que me lo han hecho, fue cuando más dolió, porque no solamente me dieron la espalda, sino que me clavaron una espada en el alma…

Comienzo a odiar el MSN, me trae recuerdos de una dolorosa decepción…

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