martes, 22 de septiembre de 2009

De príncipe a sapo

¿Por qué? eso es algo que no entiendo ¿Por qué las personas son malas y mentirosas? ¿Por qué las personas solo hablan por hablar? ¿Por qué las personas no son sinceras?, creo que sería más fácil decir la verdad, decir si me gustas, pero no creo querer nada en serio contigo o de plano decir, me agradas, pero no me gustas o simplemente responder riendo cuando alguien pide algo que no sabes si realmente quieres ofrecer

Nos ahorraríamos muchos problemas, muchos corajes, muchas decepciones, si fuésemos más sinceros, al evitar eso pensando que de esta manera herimos menos, no lo es, al decir ciertas cosas, al dar falsas esperanzas a una persona lastimamos más que si dijésemos la verdad

Cada cabeza es un mundo, cada mundo da vueltas a diferente velocidad, órbita de manera diferente, pero no por eso hay derecho de crear ilusiones o decir cosas que jamás se harán o prometer situaciones que nunca se cumplirán´

Las máscaras que usamos son lo único que cambian, la forma en la que nos manejamos en la vida, porque en realidad las personas no cambian de un año para el otro, pueden dar una apariencia de cambio, pero en realidad tarde o temprano vuelven a cometer los mismos errores, vuelven a mentir, vuelven a engañar o vuelven a confiar en quienes ya han demostrado que no son de fiar

Esperando encontrarme con mi príncipe me encontré con alguien, alguien que creí que sería el príncipe ideal para mí, gran error, las mujeres no deberíamos de dejarnos llevar por las palabras, las palabras el viento se las lleva, las personas pueden decir muchas cosas, pero no hacer tantas, he así que quien supuse un príncipe hizo una graciosa regresión al sapo verde del pantano que en realidad siempre fue

Las mujeres deberíamos de ser sordas, dejar de oír todas las palabras dulces que los sapos saben bien que nosotras queremos oír, deberíamos de ser sordas y ver los hechos verdaderos de quienes podrían ser o no algún día nuestros príncipes, para poder distinguirlos de los sapos

¿Y aquí quien falló? Los dos, no es por excusarlo, pero yo le creí, ese fue mi error y él habló de más, ese fue su error

¿Será lección aprendida? eso es algo que no lo sé, el creer que un sapo se pueda convertir en príncipe siempre ha sido mi error, el confiar en las palabras, es otro de mis errores, tal vez, la próxima vez que esté cerca de una situación parecida recuerde lo que escribo el día de hoy y retroceda en mis pasos

Las palabras en el amor no deberían de contar, es tan fácil decirlas, pronunciarlas, pero a la vez tan difícil asumir la responsabilidad de ellas

No hay comentarios: